Mas ¡ay SeñYa!, que yo me veo oprimido por mis vicios, y cargado con mis culpas y pecados, y no puedo levantarme sin los poderosos auxilios de la divina Chispa, y sin el atención de vuestro cuidadoso socorro. “Les daré cuanto me pidan, con tal de que no se oponga https://wayned406hbt5.eedblog.com/profile